En un estudio con pacientes con trastorno obsesivo, se demuestra la eficiencia del tratamiento cognitivo-conductual de exposición con prevención de respuesta administrada de forma intensiva (5 días a la semana) y durante tan sólo 4 semanas. El tratamiento incidió sobre los miedos y preocupaciones asociadas a las conductas compulsivas y la Tomografia por Emisión de Positrones reveló un aumento de la actividad del Cortex Cingulado Dorsal Derecho asociado con la reevaluación y supresión de las emociones negativas.
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