Médicos de la Universidad de Florida aplicaron un programa de rehabilitación a un niño que a los 3 años recibió un disparo con un arma de fuego, no pudiendo a consecuencia de ello caminar. Tras 76 sesiones de fisioterapia en un gimnasio, estimulando el movimiento y el tono muscular de los miembros inferiores, consiguieron finalmente que el niño consiguiera andar con la ayuda de un andador.
Este estudio ofrece evidencia a favor de que determinados circuitos neuronales que controlan funciones musculares y que han sido lesionados por accidentes, pueden volver a ser funcionales utilizando programas de rehabilitación neuropsicológica. Este resultado ha sido posible debido a que la lesión que sufrió en la médula espinal no era grave.